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Artículo - ¿Existen los seres extraterrestres?



Por Jaime Simán

Hoy en día hay una verdadera obsesión por descubrir vida en otros planetas y hacer contacto con seres extraterrestres. De hecho, no pasa un mes sin que leamos algún artículo en los periódicos o revistas que alimente las esperanzas de muchos lectores, de que pronto descubriremos vida extraterrestre. 

El interés va más allá de mera curiosidad. El descubrimiento de vida extraterrestre es de vital importancia para los evolucionistas, ya que según ellos, ni nuestro planeta ni nosotros somos creación especial de Dios. Y si la vida se desarrolló en la Tierra por procesos casuales, teniendo su origen en una sopa prebiótica en el mar; y si nuestro planeta no ocupa un lugar privilegiado en el Cosmos, sino que es resultado de procesos evolutivos naturales, entonces encontrar vida en otros lugares del cosmos es sólo cuestión de tiempo. 

 Pero ¿qué nos revela la Biblia y la evidencia natural que nos rodea? 

 LA REVELACIÓN BÍBLICA 

 LOS VERDADEROS EXTRATERRESTRES DESCUBRIMIENTOS RECIENTES CRISIS DE IDENTIDAD 

 La revelación bíblica nos da a conocer que en el orden de su creación, Dios hizo nuestro planeta Tierra el primer día, continuando luego su obra creativa en función de la Tierra, proveyéndola de atmósfera el segundo día. 

 El tercer día Dios levantó el suelo sobre el mar, formando así un gran continente, y llenándolo de vegetación. Continuó su obra majestuosa el cuarto día creando el Sol, la Luna y las estrellas en función de la Tierra y del ser humano que crearía al final. 

El quinto día Dios continuó su obra en la Tierra llenando el planeta de aves y peces. Y luego, poblándola con reptiles, bestias del campo, y ganado el sexto día, en el cual creó al hombre, culminación de su obra creadora: La Tierra y el cosmos siendo el hogar del hombre creado a su imagen y semejanza. 

 La Tierra es, pues, sin lugar a duda, central en cuanto al propósito de la obra creadora de Dios, siendo el ser humano su culminación. 

ORGANIZACIÓN SETI

SETI, Search For Extra Terrestrial Intelligence, (Búsqueda de Inteligencia Extra Terrestre) es una organización no gubernamental fundada en 1984 con el propósito de explorar, descubrir, entender y explicar el origen de la vida en el cosmos. 

 Paul Allen, cofundador de Microsoft, invirtió 30 millones de dólares en esta organización, junto con 20 millones aportados por la Universidad de Berkeley, para instalar en el año 2007 cuarenta y dos radiotelescopios en el norte de California: The Allen Telescope Array. Este sistema de radio antenas en forma de discos, se usa para rastrear el cosmos en busca de señales de radio que revelen una fuente inteligente. 

 Desde su fundación en 1984 SETI no ha detectado absolutamente ningún indicio de vida inteligente. No me sorprende. Es más, me parece inconsistente que los evolucionistas estén buscando señales de radio con un patrón que revele código, y por lo tanto una fuente inteligente como su causa; pero cuando observan el código complejo y maravilloso del ADN de la célula, insisten que es resultado del tiempo y la casualidad, negando la obra majestuosa del Creador. 

"LA ÚNICA EVIDENCIA REAL Y CONCRETA QUE TENEMOS DE SERES EXTRATERRESTRES ES LA DE LOS ÁNGELES CREADOS POR DIOS."

 La única evidencia real y concreta que tenemos de seres extraterrestres es la de los ángeles creados por Dios. Claro, ellos son seres espirituales, no del tipo de seres extraterrestres que los evolucionistas esperan encontrar. Algunos de esos ángeles cayeron de su posición original al rebelarse contra Dios. Éstos son los que la Biblia llama demonios, los cuales están en guerra contra Dios y su creación.

Considero probable que algunos que rehúsan abrazar la revelación bíblica de Dios y prefieren creer la mentira, entrarán en contacto con demonios, quienes presentándose como seres extraterrestres avanzados los engañarán y confundirán arrastrándolos a la condenación eterna 

 ¿Pero qué de los descubrimientos prometedores recientes? Bueno, basta leer con juicio crítico las publicaciones para darse cuenta que son ¡puro humo! No se ha encontrado ninguna evidencia de vida en otros planetas. Muchas publicaciones carecen de ética, y las aseveraciones espectaculares que hacen carecen del respaldo adecuado. Lamentablemente, los ingenuos muerden el anzuelo ¡fácilmente! 

 El que se encuentre agua en un planeta no es criterio para concluir que abriga vida. No basta agua para la vida. Incluso si existiera agua, y además del agua todos los átomos y elementos químicos necesarios, la organización de estos átomos en formas complejas de la vida no es casual. Los átomos no tienen la capacidad de organizarse por sí solos en las moléculas complejas necesarias para la vida. La organización requerida para formar la vida es externa a la materia. ¿Y qué de todas las condiciones necesarias para mantener la vida, tales como la temperatura, atmósfera apropiada, y muchas más que los artículos prejuiciados pasan por alto? 

 En una publicación en el Orange County Register del 30 de mayo del 2007, Maggie Fox de la agencia noticiera Reuters reportó lo siguiente: 

 “Buscadores de planetas que han detectado el año pasado 28 nuevos planetas orbitando otras estrellas, dicen que el sistema solar de la Tierra no es nada especial, y que pudiera haber miles de millones de planetas habitables. …

“Estamos comenzado a ver que nuestro hogar no es algo poco común en el universo” dijo Geoffrey Marcy, un profesor de astronomía en la Universidad de California en Berkeley, quien dirigió el equipo de investigación.” 

 ¡Un momento! El que existan planetas orbitando estrellas en otras galaxias no significa que muchos de ellos abriguen vida, o que sea probable que la vida surja por accidente en ellos. Es como si al encontrar un depósito de bolas de ping-pong y pelotitas de golf, esperemos encontrar muchos huevos de tortuga entre ellas: Sería ¡totalmente absurdo! 

 La búsqueda de vida en el cosmos sigue intensa. Y a pesar de los miles de millones de dólares que se invierten en ella, sigue infructuosa. Se ha descubierto por ejemplo, que el planeta Marte, adonde los evolucionistas han puesto grandes esperanzas de encontrar indicios de vida, tiene una atmósfera sumamente rala: 1% de la atmósfera terrestre. Y su composición no es nada favorable para la vida: 0.1% de oxígeno (O2), y 96% de dióxido de carbono (CO2). La búsqueda de metano, la cual sería un posible indicio de que ha habido vida en Marte, no ha dado resultados positivos. El metano es un gas generado por organismos vivos, pero puede provenir de otra fuente. 

CRISIS DE IDENTIDAD

 El impacto de los medios de comunicación, que continuamente aseveran que el encontrar vida en otros panetas es sólo cuestión de tiempo, es claro: En una encuesta realizada por CNN, a la pregunta “¿Cree usted que existe vida en otros planetas? ” el 86% contestó afirmativamente. Sólo el 14% contestó “No”. Fuente de información: www.cnn.com - Diciembre 3 del 2010. 

 Son muchos quienes, debido a la educación y medios de comunicación prejuiciados, creen que la Tierra no es creación especial de Dios, y que el ser humano es resultado de la evolución ciega de la materia. No debe sorprendernos, pues, la tremenda crisis de identidad que tienen muchos adolescentes hoy en día. Su baja estima de sí mismos, su confusión, y su falta de metas a largo plazo y eternas, se debe en gran parte a la cosmovisión evolucionista promovida por los medios de comunicación y los mismos sistemas educativos. 

 Amigo, si queremos entender la naturaleza humana, y el propósito de nuestra existencia, en lugar de consultar con los evolucionistas debemos consultar con nuestro Creador. ¿Cómo? A través de su palabra, la Biblia. Ahí desaparece ¡toda crisis de identidad! Es ahí donde podemos llegar a conocer a nuestro Creador, el inmenso amor que nos tiene, y la vida abundante y eterna que ofrece. 

 David, el pastor y rey de Israel, hace unos 3,000 años escribió: “Te alabaré, porque asombrosa y maravillosamente he sido hecho; maravillosas son tus obras, y mi alma lo sabe muy bien.” Salmo 139:14 

 Y Juan, el discípulo amado de Jesús, declaró: “De tal manera amó Dios al mundo, que dio a su Hijo unigénito, para que todo aquel que cree en El, no se pierda, mas tenga vida eterna.” Juan 3:16.